Benito Mussolini nació el 29 de julio de 1883 en Dovia di Predappio, en la provincia de Forlá, hijo de Rosa Maltoni, maestra de escuela primaria, y Alessandro Mussolini, herrero. Primero estudió en el internado salesianoen Faenza (1892-'93), luego en el Carducci College en Forlimpopoli, obteniendo también un diploma como maestro de primaria.
Animado por su padre, un socialista facinoro y violentamente anticlerical, comenzó su carrera política precisamente con la pertenencia del Partido Socialista Italiano (PSI). Poco tiempo después se topa con una verdadera aventura. Con el fin de escapar del servicio militar, de hecho, huye a Suiza, donde conoce a importantes líderes revolucionarios, y está fascinado por las ideas marxistas.
Volviendo a Italia en 1904 después de ser expulsado de los cantones por activismo antimilitar y anticlerical repetido y exasperado, escapó del castigo por la reticencia a la palanca gracias a un error burocrático, para luego llevar a cabo el servicio militar en el regimiento de objetivos estacionados en Verona.
Durante un corto tiempo también encontró tiempo para enseñar en Tolmezzo y Oneglia (1908), donde también colaboró activamente en la revista socialista "La lima"; después de eso, regresa a Dovia.
Sin embargo, la actividad política continúa incesantemente. Entre otras cosas, fue encarcelado durante doce días por apoyar una huelga de obreros. Luego ocupó el cargo de Secretario de la Cámara de Trabajo en Trento (1909) y dirigió otro periódico: "La aventura del trabajador".
Pronto chocó con círculos moderados y católicos y, después de seis meses de propaganda frenética, fue expulsado del periódico en medio de las vibrantes protestas de los socialistas de Trentino, provocando un amplio eco en toda la izquierda italiana. Regresa a Forlá, donde se une, sin lazos matrimoniales, civiles o religiosos, con Rachele Guidi, hija del nuevo compañero de su padre.
Juntos tuvieron cinco hijos: Edda en 1910, Vittorio en 1925, Bruno en 1918, Romano en 1927 y Anna Maria en 1929. En 1915 se celebró el matrimonio civil y en 1925 el religioso.
Al final del Congreso Socialista en Milán en octubre de 1910, todavía dominado por reformistas, Mussolini planea sacudir a la minoría maximalista, incluso a riesgo de separar al partido, causando la salida de la ISP de la federación socialista Forlivese, pero nadie más lo sigue en la iniciativa.
Cuando llega la guerra en Libia, Mussolini aparece como el hombre más adecuado para encarnar la renovación ideal y política del partido.
El protagonista del congreso de Emilia en Reggio Emilia y asumió la dirección del diario "Next!" a finales de 1912, se convirtió en el principal catalizador para la insatisfacción de la sociedad italiana, empeñada en crisis económicas e ideales.
El estallido de la Primera Guerra Mundial encontró a Mussolini en la misma línea que el partido, a saber, la neutralidad. Sin embargo, en pocos meses, en el futuro Duce madura la convicción de que la oposición a la guerra acabaría arrastrando a la ISP a un papel estéril y marginal, mientras que, en su opinión, habría sido apropiado aprovechar la oportunidad para recuperar a las masas en el camino hacia la renovación revolucionaria.
Renunció a la dirección del periódico socialista el 20 de octubre de 1914, sólo dos días después de la publicación de un artículo propio que señalaba el cambio de programa.
Después del derrame de la siguiente! Decidió empezar su propio periódico. A principios de noviembre fundó "El pueblo de Italia", una hoja ultranacionalista y radicalmente desplegada en posiciones intervencionistas junto a la Intesa. La gente, a juzgar por el rotundo auge de las ventas, está con él.
Como resultado de estas posturas, también fue expulsado del partido (que es del 24 al 25 de noviembre de 1914) y fue llamado a las armas (agosto de 1915). Después de ser gravemente herido durante un ejercicio de entrenamiento puede volver a la dirección de su periódico, de las columnas de las cuales rompe los últimos lazos con la antigua matriz socialista, proponiendo la implementación de una sociedad productivo-capitalista satisfacer las necesidades económicas de todos los paseos de todos.
Las necesidades no expresadas de esa serpiente en la sociedad italiana Mussolini sabe cómo recogerlas sagazmente y un primer intento lo hace con la fundación, que tuvo lugar en Milán el 23 de marzo de 1919 con un discurso de Mussolini en Piazza San Sepolcro, de los "Paquetes de Lucha" basado en una mezcla de ideas radicales de izquierda y nacionalismo acalorado.
La iniciativa no es a primera vista un gran éxito. Sin embargo, a medida que la situación italiana se deteriora y el fascismo se caracteriza como una fuerza antisindical y antisocialista, Mussolini ha ganado cada vez más apoyo y opiniones de los sectores agrario e industrial y de la clase media.
La "Marcha sobre Roma" (28 de octubre de 1922) abre las puertas para que Mussolini forme el nuevo gobierno, formando un gabinete de amplia coalición que dé muchas esperanzas para el advenimiento de la esperada "normalización".
El poder se consolida aún más con la victoria en las elecciones de 1924. Más tarde Mussolini pasó por un período de gran dificultad debido al asesinato del diputado socialista Giacomo Matteotti (10 de junio de 1924), el primer gran asesinato fascista (aunque los historiadores contemporáneos no lo traen de vuelta Los propios deseos de Mussolini).
La reacción opuesta no es larga. A finales de 1925 fue objeto de numerosos ataques firmados por socialistas (el primero fue el de Tito Zaniboni), masones, anarquistasy otros (incluso una mujer irlandesa solitaria).
El hecho es que a pesar de la afirmación de un régimen claramente dictatorial, Mussolini logra conservar y, a veces, aumentar, su popularidad explotando inteligentemente algunas iniciativas genéricamente populistas como la resolución de la larga problema de la llamada "cuestión romana", realizando a través de los Pactos Lateranenses (11 de febrero de 1929, firmado en nombre del Vaticano por el cardenal Pietro Gasparri, Secretario de Estado) la reconciliación entre el Estado italiano y la Iglesia .
Una propaganda incesante comienza a exaltar los dones del dictador, pintado de vez en cuando como "genio" o como "líder supremo", en una exaltación de la personalidad típica de los regímenes totalitarios.
Con el tiempo, sin embargo, la Historia dará dramáticamente razón a la Realidad. Los eventos muestran un líder incapaz de tomar decisiones firmes.de una estrategia a largo plazo no vinculada a eventos contingentes.
En política exterior, con el objetivo de renovar y fortalecer el prestigio de la nación en una mezcla inusual de cauteloso realismo imperialista y literario del romanismo, tiene una conducta largamente incierta e indescarrilable.
La conquista, por un lado, lo hace llegar al punto más alto de su fama en la patria, pero por otro lo hace envidioso para el Reino Unido, Francia y la Sociedad de Naciones, obligándolo a un acercamiento progresivo pero fatal con la Alemania de Hitler, con el al firmar, en 1939, el llamado "Pacto de Acero", un acuerdo que lo vinculó oficialmente a ese infame régimen.
El 10 de junio de 1940,aunque no estaba preparado militarmente, decidió ir a la guerra asumiendo el mando supremo de las tropas operativas, bajo la ilusión de un triunfo rápido y fácil. Desafortunadamente para él (¡y para Italia!), la fortuna resulta ser negativa y dramática para El Mussolini y el fascismo.
Después de la invasión anglo-estadounidense de Sicilia y una de sus últimas conversaciones con Hitler (19 de julio de 1943) fue desautorizado por el Gran Consejo (24 de julio) y arrestado por el rey Víctor Manuel III (25 de julio).
Se trasladó a Ponza, luego a Magdalena y finalmente al Campo del Emperador en el Gran Sasso, el 12 de septiembre fue liberado por paracaidistas alemanes y llevado primero a Viena y luego a Alemania, donde el día 15 proclamó la reconstitución del Partido Republicano Fascista.
La liberación de Mussolini es ordenada por el propio Hitler, que confía su ejecución al austriaco Otto Skorzeny, más tarde declarado por los aliados "el hombre más peligroso de Europa" por sus habilidades y por su audacia.
Mussolini pasa por períodos de evidente cansancio, ahora es "empleado" por Hitler. Se estableció en Salá, sede de la nueva República Social Italiana (RSI). Cada vez más aislado y carente de credibilidad, cuando los últimos departamentos alemanes son derrotados, propone a los líderes de la C.L.N.A.I (Comité de Liberación Nacional de Alta Italia) una transferencia de poderes, que es rechazada.
Disfrazado de soldado alemán, intenta escapar con su compañera Claretta Petaccia la Valtellina. Fue reconocido en Dongo por los partisanos, más tarde arrestado y ejecutado el 28 de abril de 1945 en Giulino di Mezzegra (Como).
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